miércoles, 3 de agosto de 2011

La prisión de Puerto III (Soneto 470)


Entre campos de gualdos girasoles,
a la diestra, según se va a la playa,
se encuentra emparedada la canalla,
la escoria de los predios españoles.

Al menos estos son los francos roles
que asignamos, en la mundial batalla,
a los que parapeta la muralla
penados a privarse de los soles.

Yo creo que pasa, igual que en la locura,
que dentro no están todos los que son,
ni todo lo de dentro es torcedura.

¡Cuánto robo, violencia y extorsión
quedan libres de celda y cerradura,
mientras purga un ingenuo en la prisión!




4 comentarios:

  1. Cuanta razón tienes, no son todos los que están ni están todos los que son.
    Aqui como en otros muchos sitios, tanto tienes tanto vales y así los podemos ver de traje y corbata, gomina en el pelo y programa en la TV.
    Un abrazo.

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  2. Anónimo23:38

    Bendita bondad la tuya.

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  3. jesús21:44

    creo que ya voy adivinando tu oficio...

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  4. Se dice "persigue el delito y compadece al delincuente", cuando paso por un sitio así, se me viene esa frase a la cabeza. Pensando, por supuesto en los que están allí.
    Pero cuando pienso en todos los que andan suelto y son auténticos castigos sociales, me da cosita. Porque el dinero puede mucho en detrimento de la justicia.

    Un abrazo

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